Uno de los abogados de la Sociedad de los Prisioneros Palestinos (PPS) se entrevistó con el detenido polÃtico Jamal Darabia, de 35 años, proveniente de Gaza, que se encuentra encerrado en la cárcel israelà de Eshil , y quien padece de cáncer y no está recibiendo tratamiento médico alguno. La negligencia de las autoridades de la prisión israelà ha dado pie a un deterioro severo en su condición de salud. Darabia fue secuestrado por el ejército el 2005, y sentenciado a perpetuidad. El sufre de mucho dolor tras tres intervenciones en su espalda. Lamentablemente, éstas no lograron su acometido y se le abrieron los puntos, mientras la piel debajo está disolviéndose y sangra en forma profusa.
Su abogado dijo que él podÃa ver los huesos en la espalda de Darabia, tras afirmar que éste no estaba recibiendo la atención urgente a sus necesidades.
El prisionero, por su parte, indicó que requiere cirugÃa en su espalda y que sabe que ésta podrÃa llevarle a una parálisis o una lenta muerte, según le fue informado por los médicos de la prisión. Él está apelando para ser trasladado a un hospital especializado, a fin de recibir el tratamiento adecuado.
Varios médicos que lograron examinarlo señalaron que él padece de una forma rara y seria de cáncer que hace disolver su piel y causar sangramiento.
Por su parte, el abogado de la PPS también se las arregló para visitar al detenido Mahmoud Abdullah Al Sha’er, de 30 años, también de Gaza. Al Sha’er padece de infecciones en su pecho y riñonens y sólo se le están administrando pÃldoras para el dolor, en vez de ser examinado por un médico especializado.
El abogado visitó un grupo de detenidos que se quejaban de las malas condiciones de sus rostros, incluyendo aquellas producto de ataques repetidos por parte de los soldados israelÃes. Asimismo, las persistentes multas aplicadas a un gran número de detenidos, y la repetida acción de confinamiento solitario por parte de un número de prisioneros por largos perÃodos de tiempo.
Por último, los detenidos también señalaron que varios de ellos están enfermos, incluyendo uno, Abed Saleh Al Taqtooq, 25, quien acababa de perder un brazo, tras recibir un disparo por soldados israelÃes al momento de su secuestro.
Traducción, Denise, IMEMC