El Agencia de noticias oficial libanesa, informó el viernes que una bomba de racimo lanzada por Israel durante la guerra de 2006, explotó cerca de un grupo de niños en el sur del Líbano, hiriendo a cuatro de ellos. El incidente tuvo lugar en una aldea al sur del Líbano cuando los cuatro niños, de edades comprendidas entre 10 y 15 años, encontraron un artefacto sospechoso mientras estaban jugando y lo cogieron hasta que se produjo la explosión.

Israel lanzó cerca de cuatro millones de bombas de racimo en Líbano durante la guerra de 2006 y casi un millón de esas bombas no explotó y siguen siendo una amenaza que ponen en peligro a la población civil.

Las bombas de racimo son consideradas ‘armas ilegales’ en virtud del Derecho Internacional, ya que dañan inevitablemente a civiles. Las bombas están hechas de cientos de ‘bombetas’, que se resquebrajan en el momento del impacto, y esparcen pequeñas bombas que explotan en un área de varios kilómetros. A pesar de que el arma está prohibida, el ejército israelí ha calificado el uso de estas bombas de ‘necesidad militar concreta’ para la invasión de Líbano.

Después de la guerra, dirigentes libaneses, grupos internacionales de Derechos Humanos y jefes de Estado, han acusado a Israel de participar en crímenes de guerra durante la invasión del estado del Líbano, entre otras cosas por el uso de armas prohibidas como las bombas de racimo.

Más de 1200 personas libanesas fueron asesinadas durante el mes que duró la invasión israelí, de los cuales menos de 200 estaban en realidad en combate. Esto significa que aproximadamente el 85% de los libaneses víctimas eran civiles. En contraposición 159 israelíes fueron asesinados por los combatientes libaneses durante la invasión, 40 de los cuales eran civiles. Esto significa que aproximadamente el 25% de los israelíes muertos eran civiles.

Durante la guerra, el ejército israelí utilizó tan desproporcionadamente la fuerza contra el pueblo libanés que el sofisticado ejército israelí se quedó sin existencias e hizo un llamamiento a su aliado, los EE.UU, para obtener más.

El gobierno de los EE.UU. envió rápidamente miles de bombas de racimo adicionales, que fueron inmediatamente utilizadas por los militares israelíes en el Líbano.

El Departamento de Estado de los EE.UU. más tarde emitido una declaración diciendo que las bombas de racimo enviadas por los EE.UU. a Israel habían sido probablemente mal empleadas contra objetivos civiles.

Traducción, M.A.B,IMEMC

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